Es una foto en la estación de Quilmes, volvíamos de comprar unas cosas y mi mujer nos la sacó de improviso. No soy de reír mucho y trato de no transmitirle ése defecto a mi hijo. Cuando vi ésta foto me di cuenta que había inmortalizado un momento hermoso. Sentí que mi actitud tenía que empezar a ser otra. La de un tipo feliz.