Soy una romántica incurable. Llevo 40 años de matrimonio y aún me emociona su amor y lo necesito como el primer día. A pesar de tener 4 hijos y 5 nietos él ha sido y es el eje de mi vida. Juntos luchamos para darles a nuestros hijos todo lo que necesitaban y aún más, pero nunca perdimos el eje:él y yo. Ahora nuestros hijos ya formaron sus respectivos hogares y nosotros disfrutamos ese espacio que nos dejaron libres. No fue fácil debimos atravesar el síndrome del nido vacío y la jubilación. Todo un cambio de vida pero lo superamos y ahora disfrutamos la vida . Tenemos amigos en común y espacios del otro que cada uno respeta. Aprendimos que somos muy distintos pero que hay cosas que nos gusta compartir. Nos divertimos y a pesar de las ñañas propias de la edad, salimos mucho y la pasamos muy bien y aún me emocionan sus abrazos y el a veces está celoso, y me hace sentir joven. Por eso les puedo decir que tengo muchos días felices y llegar a los 72 y sentirte joven es muy bello.